Fantasma atrapado en casa

Hace 20 años llegue a vivir a una casa de la colonia San Marcos a pesar de que esta estaba recién construida o remodelada nos dimos cuenta de que algo raro pasaba en esta ya que se escuchaban bastantes ruidos y la vibra era densa.

Cuando llegaba la noche y nos íbamos a dormir cada día escuchábamos a alguien fuera de las habitaciones, y en ocasiones podíamos ver una sombra que pasaba fuera de la habitación ya que mi hermana menor y yo dormíamos juntas.

Cuando le comentábamos a mi mama lo que veíamos nos decía que era lo que imaginábamos o que queríamos llamar la atención porque teníamos un hermanito de poco tiempo de nacido, era muy curioso porque solamente mi hermana y yo podíamos notar todas las cosas que pasaban en casa.

En una ocasión ya eran poco más de las tres de la mañana y yo estaba estudiando ya que tenía un examen en la escuela al día siguiente pero mi hermana si se quedos dormida, yo estaba tan concentrada en lo que estaba estudiando que por primera ocasión desde que llegamos a esa casa yo no tenía miedo.

Terminé de estudiar y me dispuse a guardar mis cosas y en ese momento claramente pude ver a alguien salir de la habitación, la piel se me erizó sentí un miedo como nunca antes fue un giro total, Sali corriendo tras esa persona para ver quién era, corrí tras de esta persona y cuando ya la tuve muy cerca me di cuenta que se trataba de una jovencita que al llegar al baño como por arte de magia desapareció.

Ante esto me quede helada no podía moverme, no sé qué sucedió, pero yo amanecí dormida en el pasillo cuando mi mama me pregunto el por qué no supe que decir me quede como suspendida, a partir de ese día a mí me daba miedo incluso entrar en mi habitación, o salir al baño sola.

Esta situación era difícil ya que mis padres no nos creían y además cada día era más fuerte lo que sucedía, de dormir en la misma habitación con mi hermana en diferente cama ahora dormíamos juntas, días después yo prefería dormir en el piso afuera del cuarto de mis padres, me llevaba mi cobertor y almohada las tiraba en el piso y me dormía en ese lugar, a los pocos minutos mi hermana hacia lo mismo.

Después de algún tiempo y de tantos regaños mi mama comenzó a ponernos más atención pues veía a mi hermanito que sonreía viendo al vacío, como si le sonriera a alguien y con la mirada seguía fijamente hacia diferentes lugares dependiendo en donde estuviéramos.

Después de esto comenzamos a hablar de todo lo que pasaba y más porque en una ocasión cuando veníamos llegando de la escuela encontramos a una mujer fuera de la casa y estaba sentada en un tronco que teníamos a modo de banca, lo curioso es que la señora estaba llorando y rezaba, mi mama le pregunto que si le podía ayudar en algo y la señora no respondió solo se alejó.

Después de algunos días volvimos a ver a la misma mujer sentada en el tronco y sucedió lo mismo mi mama le hablaba y la señora solo se alejaba, mi familia no convivía mucho con los vecinos pues mis padres decían que así evitábamos problemas.

Pero ante tal situación mi papa le pidió al vecino que nos echara un ojo cuando él no estuviera ya que le preocupaba el hecho de que esa mujer esta todos los días fuera de la casa, un par de semanas después vimos a la mujer platicando con la vecina pero en cuanto nos vio se fue me imagino que no quería que mi mama comenzara a interrogarla ya que apresuro el paso, pero como era de esperarse mi mama se acercó a la vecina para preguntarle si la conocía y le comento que le parecía inquietante que esa mujer pasara todos los días en casa.

Entonces la vecina le dijo que no se preocupara que esa señora fue la antigua dueña de la casa que ahora era nuestra y que ella pensaba que su hija seguía en casa al menos en espíritu, pues al parecer la joven se suicidó en esa casa ya que su padrastro le propinaba golpizas además de haber abusado sexualmente de ella y ante la incredulidad de su madre etas pensó que esa sería la mejor salida.

Desde entonces la mujer se sintió culpable por haber llevado a casa lo que termino con la vida de su hija, después vendió la casa ya que sentía que su hija seguía en ese lugar y le ocasionaba demasiada tristeza y a pesar de que aquel hombre fue sentenciado a años de prisión ella dice que algún día el pagara lo que le hizo a su única hija.

Fue entonces que entendimos que la chica que nosotras podíamos ver efectivamente era la hija de la señora ya que desaparecía justo en el lugar que se presumía se había suicidado, mi mama mando bendecir la casa y le oficiaron una misa a la cual la antigua dueña fue invitada, así como algunos vecinos, desde este día ya no la volvimos a ver.