Casa llena de Sufrimiento
Hace algún tiempo me mude a vivir aquí a León de recién que llegue a la ciudad rente una habitación mientras me acomodaba en el trabajo y encontraba un lugar mejor y poder traer a mis hijos.
Después de varias opciones encontré una que me pareció muy cómoda y con el espacio suficiente para poder traer conmigo a mis dos hijos y a mi mamá ya que desde que falleció mi papá pues ella se mudo conmigo.
Antes de tomar cualquier decisión al comprarla les pedí que vinieran a visitarme para que pudiéramos ver la casa juntos, por cuestiones de la escuela pues obviamente se podía asta el fin de semana.
La persona que me vendería la casa me dijo que si quería me podía quedar en el lugar para que la checara y viera que tenía cerca bastantes negocios que seria muy cómoda pues la colonia es muy tranquila, la verdad yo no quería comprarla sin que mi familia me diera el visto bueno pues para mi era muy importante.
Por desgracia el fin de semana mi hijo menor enfermo y el doctor nos comentó que quizá no seria lo mejor que el viajara, entonces le pedí a la persona encargada que me rentara la casa para esperar a que mi familia viniera y de esta manera no le seria tiempo perdido, ella accedió yo compre muebles para recibir a mi familia en cuanto les fuera posible ya que de igual manera ya fuera en ese lugar o en otro ocuparía las cosas.
Paso un mes y a pesar de que me parecía super cómoda y con muy buen espacio la verdad todo el día me sentía un poco nerviosa como si alguien me viera o que alguien pasaba cosas así por el estilo, no le daba mucha importancia ya que igual me ponía a pensar que quizá sería que por estar sola y que cualquier ruido o sombra me suponía nerviosa.
Cuando por fin llego mi familia mi hijo menor no quería ni entrar a la casa, decía qua adentro estaban unos hombres ensangrentados, nos pareció bastante extraño ya que él nunca había tenido alguna reacción así, al cabo de un buen rato logramos hacerlo entrar, pero se la pasaba detrás de mí y no quería ni siquiera ir al baño solo.
La situación en un solo día ya me parecía bastante estresante, llego la hora de ir a la cama y pensé que les encantaría ver que cada uno tenía su habitación resulto lo contrario por completo pues a ambos les dio miedo ocupar sus cuartos entonces se quedaron a dormir conmigo.
Pero teníamos apenas unos minutos cuando mi hijo menor gritaba con los ojos cerrados y llorando ósea parecía estar durmiendo en medio de una pesadilla, en varias ocasiones de la noche paso lo mismo, en la mañana le pregunté que sucedió y decía que el veía a muchas personas en el lugar y que le pedían ayuda o lo querían golpear, pensé que se podía haber estresado en el viaje o que los medicamentos podían haber ocasionado eso, mil ideas pasaban por mi cabeza.
Apenas teníamos tres días juntos y cada día era lo mismo entonces por cuestiones de trabajo tenía que ir a Guanajuato y pensé que seria una buena idea llevarlos para que se desestresaran y conocieran otro lugar, ese día termine ya bastante tarde y no quería manejar en la carretera así que nos quedamos a dormir en un hotel y planeamos al día siguiente dar un paseo en la ciudad para conocer ya que nunca habíamos venido.
Yo ya estaba esperando el momento de que esa noche mi niño despertara gritando como los otros días, pero valla sorpresa durmió super bien sin ningún problema ningún grito, todo super tranquilo.
A la mañana siguiente le pregunte que como se sentía y el me respondió que muy bien es mas incluso su semblante era diferente, era un niño feliz no paro de correr de hablar de disfrutar cada momento y cada lugar en el que estuvimos en Guanajuato cuando les comenté que era hora de regresar parecía que lo había apagado se puso triste, de cualquier manera teníamos que regresar y al llegar a la casa nuevamente paso lo mismo los gritos la falta de sueño el miedo.
Al ver todo eso mi mama me sugirió que buscáramos otro lugar, le dije que me daría el tiempo de en esa misma semana buscarlo, pero al día siguiente en la oficina le platique lo sucedido a mi compañera y me pregunto qué en donde vivía, ¿¿¿le dije la dirección y me dijo asombrada – te animaste a vivir en esa casa???, yo muy sorprendida le pregunte que que tenia de especial ese lugar o porque su sorpresa.
Entonteces ella me dijo que se trataba de la casa de un caso muy sonado en la ciudad pues se trataba de la casa de los “cocineros” unas personas relacionadas con la desaparición de mucha gente, y quizá lo que mi hijo veía eran las almas atrapadas de la gente a la que quizá en esa casa habían sufrido mucho y pasado sus últimos minutos de vida.
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