Jesús Castillo Aguilera "Chucho Castillo "

Jesús Castillo Aguilera

nació en Nuevo Valle de Moreno, Guanajuato, el 17 de junio de 1944.

muere el 14 de Enero del 2013 en un hospital de la Ciudad de México por las complicaciones que sufrió tras una cirugía.

 Como boxeador profesional sostuvo un total de 67 peleas y fue uno de los mejores peso gallo en la historia del boxeo mexicano.Hizo su debut profesional el 26 de abril 1962 en contra de Carlos Navarrete, con quien sufre su primera derrota por decisión después de seis rounds., obtuvo el título Nacional de Peso Gallo y posteriormente el título mundial en la misma categoría. Fue un boxeador que manejaba la defensa activa, a tal grado que puede afirmarse que su golpe poseía precisión milimétrica. En cada una de sus presentaciones lograba reunir ríos de aficionados los cuales apoyaban el talento del boxeador.

Ganó el título nacional de la división imponiéndose por decisión unánime a José Medel y posteriormente conquistó la corona mundial del mismo peso al noquear técnicamente en 14 asaltos a Rubén Olivares en El Forum de Inglewood, California.

 Chucho Castillo, que desde niño se crió en la colonia Guerrero del Distrito Federal, porque sus padres se vinieron a buscar fortuna con sus siete hermanos, fue un triunfador arriba y abajo del ring porque vencía vanidades cuando era campeón a nivel mundial, además de haber derrotado y quitado lo invicto al actual ídolo Rubén Olivares, quien fue su rival más difícil, finalmente grandes amigos.

Colgó los guantes a la edad de 31 años. Se inició a los 18 y en 1967 quitó el campeonato nacional gallo al tepiteño José Medel, siendo muy festejado por los aficionados, sobre todo por seguidores del ídolo José “Toluco” López, a quien Medel destronó y venció dos veces. Castillo tenía 23 años.

 En abril de 1970 después de perder apretadamente su primer encuentro en Los Ángeles, California, con Olivares, estando de por medio el cetro de los 52.500 kilos, conquistó el título de Norteamérica al imponerse por decisión a Rogelio Lara y en la segunda pelea que tuvo con Olivares en octubre del mismo año, se vengó y destronó al “Puas”, perdiendo simpatías ante las multitudes porque apoyaban con todo al famoso ídolo. El tercer combate millonario fue el 3 abril de 1971 en los mismos Ángeles, California. y Rubén, estando en maestro, ganó claramente a Castillo, quien sólo hizo una defensa siendo con su acérrimo enemigo, quien después fue su cuate. Tuvo que renunciar al título gallo de México para disputar el campeonato universal. El de Norteamérica lo perdió con Rafael Herrera a quien ya había vencido. Castillo después de retirarse se dedicaba a enseñar el boxeo en el Sindicato del Metro, llevando una vida ordenada, aunque aceptó que le entró a las “cheves” y a la “copita”, pero con medida, luego descubriendo que falsos amigos lo estaban inclinando al alcoholismo y con carácter y apoyado en su Fe en Dios, se alejó, entregándose a su hogar rodeado del amor de su esposa y cinco hijos.

 Castillo tuvo poca preparación escolar porque desde niño debió ayudar a sus padres con el gasto familiar, vendiendo chicles en la calle y ropa en los mercados.

Un dato no muy conocido fue que Agustín Palacios Rivera fue su manager en sus inicios y fue quien conformo el estilo boxístico de Chucho.

Otra anécdota sobre su manager Eleuterio “La Coneja” López, quien fue ayudante del reconocido Arturo “Cuyo” Hernández, Chucho decía que “a la “Coneja” sólo le interesaba el dinero y perdió la cabeza para dar instrucciones en la esquina. Fue en la tercera pelea con Olivares cuando la “Coneja” al ver que Rubén dominaba la pelea con su recto de zurda y gancho al hígado, en vez de señalarme errores me decía ” CHUCHO…CHUCHO…TIRA MAS GOLPES PORQUE LA LANOTA SE NOS VA…” siendo que yo recibía la madriza y él sólo pensaba en el dinero”.

Sobre sus rivales más difíciles, ellos fueron: Olivares, Raúl Cruz, Memo Téllez, entre otros.

A boxeadores que Jesús Castillo admiró son: Vicente “Zurdo” Saldivar ex – campeón mundial pluma ( se lo quito al cubano-mexicano Ultiminio Ramos ) y a Cassius Clay, ex – monarca de peso completo por su habilidad y forma de conectar los golpes. A Saldivar siempre le reconoció su vida disciplinada, alejado de cantinas y malas amistades, siendo ejemplo para la juventud.

“Chucho” durante varios años estuvo clasificado entre los diez primeros gallos del planeta y derrotó a muchos de los mejores hombres de su peso, tales como Rafael Herrera, “Chucho” Pimentel, Bernardo Caraballo y también al ex titular mundial pluma, Rafael Ortega.

Castillo fue un pugilista con muchos recursos, tanto técnicos como una fuerte pegada en ambos puños. Se recuerdan especialmente sus tres encuentros con Rubén Olivares en Inglewood, de los cuales ganó el segundo, y perdió primero y tercero por la vía de los puntos.

Al retirarse de los cuadriláteros dejó un récord de 67 batallas sostenidas, de las cuales ganó 47, 22 por nocaut, empató en dos ocasiones y perdió 18.

“Chucho Castillo era un cab... bien hecho”, así lo recuerda su eterno rival y amigo Rubén Púas Olivares. El héroe de la Bondojito respira profundo quien lamenta la muerte de quien fuera uno de sus contrincantes más enconados sobre el cuadrilátero, a quien enfrentó en una legendaria trilogía a principios de la década de los 70.

Apenas se dio a conocer la noticia y el Consejo Mundial de Boxeo declaró tres días de luto por la muerte del ex campeón mundial de peso gallo.